Tengo una amiga, que se ha convertido en una de mis mejores amigas de esta ciudad. De ella contaré luego. De la que quiero hablar es de su prima, una mujer muy rara que nunca terminó por caerme bien. Me saluda cuando quiere, pero sabe quién soy. Yo en cambio siempre le sonrío para que vea que no me importa. De hecho aella la conocí antes que a mi amiga. Ella daba clases de verano para niños, y una vez, en ese curso sucedió un detalle con ella en el que yo me molesté. Quizá desde ahí me trae tirria. También por cuestiones de chamba, competencia, pues su esposo se dedica a lo mismo que yo. Pero bueno, es una mujer que me parece muy interesada, convenenciera, sólo está pensando en lana.
Hace poco me enteré por vía mi amiga, que se separó de su esposo. Ellos llevaban juntos más de 10 años y ella se veía muy enamorada, me parece que lo apoyaba en todo, en el business del bato, ella como que le manejaba las cuentas, y bueno. Me enteré que él le dijo que ya no estaba enamorado. Me parece que no fue por otra persona. Me parece que él se convenció a sí mismo de ello, de ya no amarla, aunque pareciera que todo iba bien. Andaban siempre juntos, y no se veía que él anduviera de cabrón, o bueno no sé, no me consta. Relaciones raras que tardan mucho en terminar. Y bueno, no se ha sabido que haya sido por otra persona.
Curiosamente hace un momento ella estuvo sentada durante un buen rato en este café, donde su exmarido es asiduo visitante. Estuvo quizá por más de una hora, hablando por radio. Luego se fue, a los 10 mins llegó su ex-esposo y éste ve al café como una oficina así que aquí se pasa las horas. No coincidieron pero me pregunto si esa era la intención de ella. Si todavía quiere regresar con él. Me pregunto cuáles son las artimañas de ahora para recuperar el hombre perdido. Yo me acuerdo de algunas, pero hace mucho que perdí la práctica. Y esas te funcionan por un rato. Al final te das cuenta que es mejor dejar ir cuando ya no hay nada.
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